El 21 de octubre en el hotel A Quinta da Auga, el único Relais & Châteaux de Galicia, presenciamos la preciosa boda otoñal de Carolina & Javier.

Nuestro bosque de bambús fue testigo de un enlace lleno de diversión con un ambiente distendido gracias al maestro de ceremonias Dénis, primo de los novios, junto con las lecturas de  familiares y amigos. Una boda completa de amistades cercanas que hizo que todos los invitados estuvieran a gusto.

Carolina se vistió en la suite del hotel. Su vestido era de corte sencillo inspirado en los años 20. Como complemento estrella acompañando al vestido, lucía una capa de seda cubriendo sus hombros. La diadema de flores naturales conjuntaba con el ramo y complementaba de maravilla su look sencillo y de súper tendencia.

El buen gusto del novio sobresalía en su estilismo; vistió traje azulón con corbata de topos blancos que combinó con un chaleco cruzado de cuadros escoceses en tonos claros.

Así fue la espectacular entrada de la novia a través de nuestro bosque de bambú :

Cabe destacar también a los invitados que, aunque en su mayoría jóvenes, dieron una lección de estilo con sus elegantes apuestas.

El aperitivo se realizó en dos partes; una de ellas en el invernadero del hotel, un espacio totalmente abierto por su laterales que simula una prolongación del jardín interior con un diseño muy especial y paredes de piedra que le aportan más carácter.

La otra parte del aperitivo se hizo en el bosque de bambús, un espacio exterior con exuberantes verdes y con vistas a la ribera del río Sar. Ambos espacios se complementan estupendamente sobre todo en bodas en temporadas más frías.

Los aperitivos estuvieron acompañados de Smoke, una banda con música y voz tan especial que enmarcaba a la perfección el ambiente único del momento. Pulpeira, empanada, marisco… y un sinfín de productos auténticos que,  sin disfraces, fueron un éxito rotundo.

Toda la decoración fue proyectada por nuestro equipo de A Quinta da Auga, encargada a Adria Floreria, en la cual reflejamos el estilo de la novia con tonos otoñales.

Destacamos las puestas decoradas de la ceremonia, las damajuanas, los frutos de temporada y las cajas antiguas utilizadas en el seating, con botellas de vino que los novios pintaron. Y no solo pintaron las botellas de vino del seating, sino que también regalaron unos preciosos imanes realizados a mano con corchos y plantas autenticas, además de todos los divertidos “novios corcho” que entregaron totalmente personalizados y que ellos mismos pintaron.

Completando la temática de la boda, el “libro de firmas” no podía ser otro que corchos que los invitados firmaban y dejaban en una damajuana. El cuidado por el detalle de Carolina se dejaba notar en cada elemento de la ceremonia… como lo fue el detalle de sacarle a Javier su tarta favorita para que hiciera el típico corte de tarta más discreto, ¡Un súper detallazo!

La entrada en el Salón de Fonte, donde se sirvió la cena, fue muy divertida. Los novios brindaron con botellas personalizadas de Estrella Galicia regaladas por anteriores novios. ¡Qué siga la tradición!, todo el mundo se levantó para acompañarnos aplaudiendo y alzando sus servilletas.

De la música se encargó DJ Marcos que mantuvo el ritmo toda la noche.

Esta fecha quedó inmortalizada en A Quinta da Auga por Dani Davila, autor de todas las espectaculares fotos de este post.

Mil gracias de todo corazón a los novios por dejarnos compartir está preciosa historia de amor y el inicio de vuestro futuro en común ¡Qué seáis muy felices pareja!

Mar Picado Montaos responsable de bodas y eventos privados de A Quinta da Auga